La gran variedad de revestimientos para paredes nos permite decorar cualquier estancia de nuestro hogar. Son soluciones menos convencionales que solo pintar las paredes, pero les dará vida y personalidad. Además, hay muchas opciones. Elige la opción que más se adapte a tus gustos, presupuesto y estilo.
Las paredes tienen un propósito funcional y estructural, pero también decorativo. Por ello, es importantísimo elegir de forma adecuada el revestimiento de tu pared, ya que podrá ayudarte a ganar o reducir amplitud, luz, color, textura, calidez…
Aquí te contamos algunas de las opciones de revestimientos de pared disponibles. ¡Te animamos a explorarlas!
- Cerámica
Sí es un clásico, pero que nunca falla. La cerámica es resistente y súper fácil de limpiar. Ideal para espacios húmedos o que se puedan mojar con facilidad como el baño o la cocina. Para revestir el salón es importante no exagerar para no sobrecargar el ambiente. Con una pared o algún punto que quiera destacar es suficiente.
- Revestimiento que imita madera
Parece madera, pero es cerámica. Seguro que has visto más de una vez revestimientos de madera que, en realidad, no lo son. Ofrecen las ventajas de resistencia y dureza de la cerámica, pero a nivel estético la sensación de calidez de la madera. Además, con esta opción evitarías la manutención y tratamiento que requiere la madera natural, sobre todo en espacio húmedos.
- Mármol
El mármol es uno de los materiales naturales más elegantes y sofisticados. Pero, en contrapartida, tiene un coste elevado y resulta algo frío. En la actualidad, se emplea para diferentes ambientes, ya que está disponible en varios colores. Para no cargar el ambiente, y también incrementar el coste, es posible colocarlo solo en un sector de la pared, y combinarlo con otros elementos decorativos.
- Azulejos
Otro material que es un clásico. Los azulejos son cada vez más elegidos para revestir otros ambientes, además de cocina y baño. Si queremos dar un toque atractivo a un pasillo, habitación infantil u otra estancia, recomendamos usarlos con moderación, para no cargar el ambiente. Son excelentes debido a su facilidad de limpieza.x
- Gresite: paredes mosaico
El gresite es impermeable, lo que le hace ideal para zonas húmedas. Suele ser usado en piscinas, baños y cocinas. Está compuesto por placas de vidrio cocido a altas temperaturas, y esto hace que sea uno de los más resistentes y duraderos.
- Ganar Amplitud
Para tener una sensación de amplitud del ambiente, una de las soluciones es revestir una de las paredes con el mismo material del pavimento. Los interioristas suelen usar esta técnica para crear sensación de continuidad y profundidad. El color también importa, ten en cuenta tonos claros para generar sensación de amplitud.
- Piedras Naturales
Hemos recuperado el aprecio por la piedra natural. Revestir las paredes con piedras naturales como calizas, pizarras, cuarcitas… es una buena opción, ya que son increíblemente resistentes, duraderos y no requieren mantenimiento. Otra solución es revestir con materiales que imiten su efecto rústico con opciones que imiten sus relieves, tonos y texturas a la perfección.
- Microcemento
El microcemento es un revestimiento continuo, no utiliza juntas. Es impermeable y está disponible en muchos colores. Es muy fácil de limpiar y triunfa en los baños, pero cada vez más en otras estancias como salones o dormitorios.
- Ladrillo visto
El ladrillo vista sigue siendo una opción muy atractiva. Lejos de ser usados como en los años 90 donde abusaban de su uso, ahora usarlo de forma moderada, revistiendo apenas una de las paredes queda genial, y si te gusta los tonos o quieres combinarlo con la estancia, también puedes pintarlos en tonos claros.
- Papel pintado
El papel pintado es un clásico, pero su uso ha sido reinventado y ha ganado mucho, tanto como elemento decorativo de pared como en facilidad de instalación. Además, existen muchísimos diseños, tanto que resulta complicado decidirse por uno. Claro que, debido a su facilidad de instalación, siempre que quieras podrás cambiarlo. El papel pintado se puede colocar en cualquier estancia, pero si se coloca en la cocina, se puede optar por cubrirlo con un cristal. Esto evitará que con el tiempo se manche por salpicaduras.
- Revestimiento hidráulico
Las baldosas hidráulicas no solo triunfan en el suelo, sino también en las paredes, sobre todo en la cocina y en el baño. Muchos fabricantes han lanzado colecciones de estas baldosas rescatando sus diseños vintage.
- Espejos
Los espejos también pueden ser utilizados para revestir paredes y lo mejor de todo es que el espejo crea sensación de amplitud, sobre todo para espacios reducidos.
- Vidrio
Si quieres ganar en luminosidad, el vidrio podría ser una opción, combinado con otro material que aporte calidez y fluidez de comunicación entre las estancias.
- Paneles de Madera
Los paneles de madera son una apuesta segura para una sala, un recibidor. Aíslan tanto a nivel acústico como térmico y pueden cubrir imperfecciones de la pared. Además, aporta calidez y elegancia al ambiente. Una opción muy usada y que combina con toda decoración es pintarlo de blanco.
- Fibras naturales
Si prefieres soluciones más ecológicas, puedes revestir tu pared con fibras naturales. Entre ellas, el corcho, el junco y las telas. Son materiales que aíslan muy bien y le dan un aspecto original al ambiente. En contrapartida requieren un mantenimiento y con tiempo, un cambio.
- Acero inoxidable
El acero inoxidable es el material idóneo para la cocina, ya que es muy resistente a humedad y las grasas y también muy funcional. Es muy fácil de limpiar y encaja en muchos estilos de cocina.
En función del resultado que esperas y teniendo en cuenta las estructura y funcionalidad de la estancia, los distintos revestimientos para paredes te permitirán con un toque muy personal. ¡Crea un ambiente fantástico! De vida a tus a tus paredes y toda estancia ganará en estilo.
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