Porque no hay dos baños iguales, como en otras ocasiones, os traemos algunos consejos sobre cómo decorar nuestro baño para sacarle el mayor partido posible al espacio. En este caso, hablaremos de las estancias rectangulares. Este tipo de baño predomina, sobre todo, en viviendas de edificación antigua. Y aunque a simple vista parezca una tarea ardua y compleja, con estos sencillos pasos conseguiremos optimizar en gran medida el espacio. Y ubicar en el correcto sentido todos los elementos básicos de higiene personal.

Cómo optimizar el espacio

Para ello lo primero que debemos hacer es tomar las medidas exactas de la superficie. Eso nos permitirá conocer y ser conscientes de las condiciones del espacio. Seguido de ello, tendremos que valorar qué tipo de elementos vamos a incluir en nuestro baño. Por ejemplo: si vamos a incluir inodoro y bidé suspendidos; en caso de querer colocar una bañera, decidir y medir el espacio donde iría colocada; escoger el tipo de mueble y sus apliques; etc.

Dimensiones de los aparatos sanitarios

Más o menos las medidas de todos los sanitarios son estándar. Aunque es cierto que el inodoro, el bidé y la bañera tienen más flexibilidad que el resto. Con ellos será con los que más podamos jugar a la hora de decidir su ubicación en la habitación. En función, siempre, de la comodidad de uso. Por eso es importante determinar qué tipo de aparatos vamos a escoger. Si nos decantamos por los suspendidos, debemos saber que en el caso del inodoro y el bidé necesitarán un espacio destinado para su instalación. Mientras que en el caso de los muebles no habrá inconveniente de este tipo.

Disposición de los elementos a un lado

La opción de escoger uno de los laterales para incorporar todos los elementos será sin duda la más acertada. Dejando la bañera o ducha al fondo del baño. De este modo, se dejará libre espacio de circulación por delante del inodoro y el lavabo.

Liberar espacio será nuestra función si tenemos este tipo de baño. Por lo que debemos tener en cuenta que cuanto más pequeños sean los elementos del mismo, mayor sensación de amplitud tendremos. Optar por los aparatos suspendidos nos liberará el espacio visualmente en gran medida. Aunque hay que tener en cuenta, en el caso de los inodoros, el espacio de su instalación.

Otra opción sería optar por el uso de los colores claros y neutros para conseguir esa sensación visual de amplitud. Que se sumará en caso de poder obtener luz natural en la estancia.

Y por supuesto, utilizar los huecos vacíos para colocar elementos de almacenamiento descubiertos nos ayudarán a decorar el baño al mismo tiempo que mantenemos organizado el espacio.

Aún si, si queremos prescindir del bidé, por ejemplo, tenemos la alternativa del bidé empotrado. El cual se ajusta perfectamente a los espacios reducidos o de difícil organización. Además nos otorga de mucho más espacio libre que el bidé convencional.

Ducha o bañera

Dependiendo de las medidas que hayamos obtenido en el primer paso y del espacio que nos quede disponible después de escoger las dimensiones y tipos de inodoro y bidé nos dispondremos a elegir entre bañera o ducha. En función del gusto podremos escoger entre uno u otro, a veces la decisión la toma el propio espacio. Pero de no ser así, la tomaremos nosotros. De todos modos, un plato de ducha con una mampara completamente transparente dará amplitud y un aspecto mucho más holgado a la estancia.

Teniendo en cuenta que nuestro baño es rectangular, lo ideal es que el plato de ducha o la bañera se sitúen al fondo. Se trata de la decisión más acertada, ya que nos permitirá decorar mejor el resto del baño. Añadiendo así estanterías o mobiliario de almacenamiento de tamaño reducido.

Tipo de puerta

La puerta determinará el uso de los aparatos del baño. Lo normal en un baño alargado y estrecho es que la puerta de sitúe en uno de los extremos cortos de la habitación. Para optimizar así el espacio del mismo y que ésta no se convierta en un obstáculo en la utilización del resto de elementos, lo ideal es que la coloquemos corredera. Sobre todo si la puerta se sitúa en uno de los extremos largos de la habitación. Será la mejor forma de aprovechar el espacio y su funcionalidad. Evitando así que interrumpa el movimiento en el interior del baño.